La biografía del torero conocido como “Lagartijo” puede concretarse en los siguientes términos:
Rafael Molina Sánchez, conocido como Lagartijo, fue un destacado torero nacido en Córdoba en 1841 y fallecido en su ciudad natal en 1900 a la edad de 58 años. En 2002, el Ayuntamiento de Córdoba lo proclamó Califa del Toreo, título compartido con Rafael Guerra Guerrita, Rafael González Machaquito, Manolete y Manuel Benítez
Familia. Hijo del banderillero y matador de novillos Manuel Molina, “Niño de Dios”y de María Sánchez, hermana del torilero de la plaza de toros de Córdoba, Rafael Sánchez, Poleo; los Poleo fueron una saga de torileros de Córdoba. Rafael Molina heredó tanto por la parte paterna como por la parte materna —su abuelo además fue novillero— la afición al toreo desde una edad muy temprana; Lagartijo tuvo tres hermanos que también estuvieron relacionados con el mundo de los toros.
Inicios. Desde su infancia, Lagartijo estuvo inmerso en el universo de los toros. Crónicas de la época señalan que a los 11 años ya lidiaba con becerros. Pronto se desempeñó como banderillero, integrando una cuadrilla de niños cordobeses que le otorgaron el apodo de Lagartijo, debido a su estatura y carácter vivaz. A partir de entonces, en 1856, Lagartijo empezó a trabajar a tiempo completo en la cuadrilla del matador José Dámaso Rodríguez, Pepete junto a Rafael Bejarano, Francisco Rodríguez, Caniqui y Manuel Fuentes, Bocanegra. Lagartijo se mantuvo en la cuadrilla de Pepete hasta 1862, cuando el diestro fallece en Madrid el 20 de abril tras una cogida del toro de la ganadería de Miura llamado Jocinero; Lagartijo pasó entonces a formar parte de la cuadrilla de José Carmona. Hasta 1865 desempeñó el rol de matador sobresaliente bajo la dirección de Antonio Carmona "El Gordito".
Alternativa. Tras una larga trayectoria de actuaciones como banderillero y matador, Lagartijo pidió la alternativa de espada. El 29 de septiembre de 1865 se anunció en el coso de Úbeda en una corrida de toros en la que se lidiaron reses portuguesas. Antonio Carmona, El Gordito fue el padrino y Antonio Luque, Camará el testigo; el toro de la alternativa fue Carabuco. Lagartijo confirmó la alternativa poco después, el 15 de octubre de 1865 en Madrid con la presencia de Cayetano Sanz en la que lidiaron toros de la ganadería Gala Ortiz.
Rivalidades. Lagartijo mantuvo diferentes pulsos con otros toreros importantes de su época con los que compartió cartel, así aparecieron las rivalidades con Bocanegra que durarían desde los inicios de ambos como novilleros hasta 1867; con El Tato rivalizó desde que este le negara poder estoquear un toro en una actuación en Cádiz en 1864; con Cúchares desde 1866, con quien Lagartijo compitió tratando siempre de sobresalir en los ruedos rozando ambos diestros la temeridad. En 1868 surgen los primeros duelos y la destacada rivalidad con Frascuelo, hecho que contribuyó a la difusión de la tauromaquia a través de las crónicas que se publicaron en las revistas taurinas del momento como La Lidia e inspiró a artistas como Daniel Perea un famoso ilustrador taurino. La rivalidad entre ambos toreros duró varios años. Tras la retirada de Frascuelo en 1890, Lagartijo compitió con otro torero cordobés: Rafael Guerra Guerrita
Madurez. Lagartijo ha sido considerado uno de los toreros más completos de la historia. Elegante con el capote, ágil banderillero, poderoso con la muleta y seguro con el acero, triunfó en todas las plazas y fue aclamado por el público. A partir de 1875, su toreo adquirió una dimensión más artística, alcanzando la cima por sus conocimientos de la lidia y su perfección en la suerte final. Durante este periodo, protagonizó feroces batallas con gran talento artístico, como la vez que se enfrentó al imponente Miura llamado Murciélago, una batalla feroz que terminó en vítores para ambos, el toro fue amnistiado y entregado como semental a la dinastía. El 5 de junio de 1880, participó en el cartel inaugural de la plaza de toros de El Puerto de Santa María.
Retirada. En 1893, tras una serie de cinco corridas en las principales plazas de España, Lagartijo se retiró después de intervenir en 1632 corridas y estoquear 4687 astados, cifra no igualada por ningún otro torero. En su última etapa, se negó a torear en la Maestranza sevillana debido a campañas hostiles en su contra. Su última actuación en Sevilla fue el 20 de abril de 1884, tras la cual se retiró apresuradamente. Al despedirse de amigos en la estación de Córdoba, expresó con voz apagada: "No atoreo más en Sevilla… ¿Qué he hecho yo para que me traten así?". Como despedida en 1893, realizó una gira por las principales plazas de España, excluyendo Sevilla.
Reconocimientos. Lagartijo es considerado el primero de los cinco califas de la tauromaquia cordobesa. El cronista Mariano de Cavia, conocido como "Sobaquillo", le otorgó la dignidad y jerarquía de ser el primer Califa cordobés. En 2002, se erigió un busto en la calle donde vivió, y su mausoleo, labrado en mármol blanco, es una hermosa obra del escultor cordobés Mateo Inurria.
Como muchos toreros, Lagartijo ha sido motivo de inspiración para diferentes pintores de la época y posteriores, entre ellos destacar la obra de Daniel Vázquez Díaz (1882-1969) «Las cuadrillas de Frascuelo, Lagartijo y Mazzantini» un óleo que el Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía adquiere en 1988 procedente de la ordenación de fondos del Museo Español de Arte Contemporáneo, MEAC
Juanita Reina, cantó Lagartijera por bulerías dedicada a los toreros Rafael Molina Sánchez, Lagartijo y Salvador Sánchez Povedano, Frascuelo. La canción formaba parte del espectáculo Solera de España N.º 2: La Niña de La Espuma, compuesta por Antonio Quintero, Manuel López-Quiroga , y Rafael de León; espectáculo estrenado en el Gran Teatro de Córdoba el 20 de octubre de 1944. Lagartijera fue también interpretada en 1946 por la Niña de los Peines acompañada a la guitarra por Melchor de Marchena.
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