Rafael Ortega Domínguez, conocido en ocasiones como "El tesoro de la Isla", nació el 1921 en San Fernando, Cádiz, y falleció en 1997 en la misma ciudad a la edad de 76 años. Este legendario torero ha dejado una marca indeleble en la historia de la Tauromaquia, siendo reconocido como uno de los grandes diestros del siglo XX.
Su destreza y maestría en el ruedo lo destacaron como un torero de una pureza y autenticidad excepcionales, tanto en el cite como en la ejecución de los muletazos y, por supuesto, en la suerte suprema. Su habilidad le llevó a obtener triunfos memorables en plazas tan emblemáticas como Sevilla y Madrid, donde salió en seis ocasiones por la Puerta Grande.
Familia. Hijo de un matador aficionado (Ortega afirma en su libro que su padre mataba en San Fernando en muchas ocasiones el llamado “toro del aguardiente”), sobrino del banderillero Rafael Ortega “Cuco de Cádiz” y hermano del novillero y luego banderillero Baldomero Ortega. Fue feliz junto a su esposa Pepita Camacho y sus siete hijos.
Novillero. Sus inicios fueron peculiares porque se estrenó como novillero sin caballos en Ceuta a una edad relativamente tardía, a los 24 años, donde estaba cumpliendo el servicio militar, su talento no pasó desapercibido. Hizo su debut en Madrid en 1949, Ortega cosechó éxitos que le llevaron a torear tres tardes más.
Alternativa. El punto culminante de su trayectoria llegó en 1949, cuando recibió la alternativa en Madrid de manos de Manolo González y Manolo dos Santos. Aquella misma tarde ya probó las mieles del triunfo cortando una oreja del primero y del último, saliendo en volandas camino a la calle Alcalá. Cinco veces más repetiría este paseíllo de Puerta Grande, en el 50, 52, 53, 54 y 58. En 1952 tuvo la alternativa en México.
Carrera como torero. A lo largo de su carrera alternó con Pepe Luis Vázquez, Pepín Martín Vázquez, Manolo González (su padrino de alternativa), Manolo Vázquez, el Litri, Julio Aparicio, Antonio Ordóñez y Antoñete
El 12 de octubre de 1952 cortó dos orejas y rabo en Sevilla y tuvo salida por la Puerta del Príncipe y su segundo rabo lo cortó en la Maestranza de un toro de Miura el 20 de abril de 1956 con otra faena y salida por la Puerta del Príncipe, para el recuerdo la inmortalizó el crítico Antonio Díaz-Cañabate en una genial crónica que veteranos aficionados aún recuerdan.
Cogidas. Desde el principio de su carrera sufrió numerosas cornadas. En una de las primeras (Pamplona, 1950) el toro le corneó en la vejiga y en la pierna: "se temió por su vida, pero pudo vencer el peligro aunque quedó siempre limitada la agilidad de la pierna". Pese todo, se mantuvo "en puesto preeminente año tras año", por dos méritos principales: su valor, que "es tan meritorio como el mayor que pueda recordarse del toreo presente o pasado"; y por su genialidad "en la suerte de matar, que practica con la perfección y la eficacia que los mejores maestros del estoque de cualquier tiempo hayan podido tener". De nuevo sufrió una cogida "de pronóstico gravísimo", en Barcelona, en 1967 que le obligó a retirarse.
Retirada. Tras una primera retirada en 1960 y una posterior reaparición se retiró definitivamente por motivos de salud el 1 de septiembre de 1968 en Marbella.
Escuela taurina de Cádiz. Tras su retirada, fue director de la escuela taurina de Cádiz, siendo maestro de varios toreros, entre ellos: Francisco Ruiz Miguel, José Luis Galloso o Jesulín de Ubrique.
Libro. Cuando ya sobrepasaba los 60 años se puso a redactar (con ayuda de un aficionado culto), su libro “El toreo puro”, que se publicó en 1986, en ese libro Rafael Ortega hace repaso de sus toreros admirados, empezando por el final de su primera etapa: Ordóñez y Antoñete, Pepe Luis Vázquez, Manolo González, Manolo Vázquez...
Reconocimientos. Desde el año 2008 cuenta con un azulejo en la Plaza de las Ventas de Madrid. donde reza el siguiente texto “RAFAEL ORTEGA DOMÍNGUEZ, EN ESTA PLAZA RINDIÓ CULTO A LA PUREZA DEL TORERO CON SU VERÓNICA, EL PASE NATURAL Y LA ESTOCADA DE LEY. CENTRO DE ASUNTOS TAURINOS. OCTUBRE 2008”.
En su ciudad natal hay monumento dedicado a este torero obra del artista sevillano Chiqui Díaz, inaugurado en el 2002
“El Tesoro de la Isla” también da nombre a un pasodoble escrito en su honor, en la década de los 80, por el compositor isleño José González García publicado con motivo de su centenario.
Autor; Feliciano Robles
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