La biografía del torero apodado “Costillares”, puede concretarse en los siguientes términos;
Joaquín Rodríguez y de Castro, conocido popularmente como "Costillares" (hijo), nació en Sevilla en 1743 y falleció en Madrid hacia 1800 a los 56 años de edad. Es reconocido como el padre del espectáculo taurino moderno, destacándose por su innovación y organización en la lidia.
Familia. Hijo del también torero sevillano Juan Rodríguez, quien además trabajaba en el matadero de Sevilla, Costillares siguió los pasos de su progenitor en ambas profesiones. Los conocimientos adquiridos en el matadero acerca de la anatomía del toro fueron fundamentales para su posterior desarrollo como estudioso de la tauromaquia.
Inicios. Su carrera taurina inició en la cuadrilla de Pedro Palomo y fue novillero por muy poco tiempo.
Alternativa. Tomó la alternativa a los 20 años de edad en las plazas de Sevilla y Jerez de la Frontera, dando comienzo a su carrera en solitario.
Carrera como torero. Durante su trayectoria, se entrelazan los logros propios con la confusión de datos debido a la presencia de su padre, también conocido como Costillares, quien compartió algunos carteles con él. Destacó en la Real Maestranza de Sevilla antes de debutar en Madrid en 1767.
A partir de 1775, surgió una rivalidad con Pedro Romero, el torero favorito del pueblo, mientras Costillares ganaba el favor de la aristocracia. También tuvo rivalidad con Pepe-Hillo. En 1789, junto con Pedro Romero y Pepe-Hillo, se convirtieron en los nombres más destacados de la tauromaquia, actuando juntos en Madrid.
Sin embargo, a partir de 1791, su carrera experimentó un declive debido a varios factores, incluida una lesión en la mano izquierda que afectó sus habilidades.
Cogidas. El 27 de julio de 1782, sufrió una grave cornada en Madrid.
Innovador. La importancia de Costillares en la historia de la tauromaquia es incuestionable. Se le atribuyen la invención de la verónica y la estocada al volapié, estableciendo las bases de estas suertes que se transmitían de torero en torero. Organizó las cuadrillas de toreros, disciplinando su actuación y convirtiéndose en el director de la lidia. Además, estableció los tercios de la lidia y modificó el traje de torear, introduciendo la chaquetilla bordada con galones de oro para los maestros y de plata para los subalternos, junto con otros elementos distintivos.
Honores. El Real de la Feria de Sevilla, le tiene dedicada una calle.
Autor; Feliciano Robles
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