Las biografías de los rejoneadores Hermanos Peralta puede concretarse en los siguientes términos:
Los Hermanos Peralta, destacados rejoneadores y ganaderos de la segunda mitad del siglo XX, conforman una pareja exitosa en el mundo taurino. Ángel y Rafael Peralta Pineda, nacidos en la localidad sevillana de Puebla del Río, son hijos de una familia agrícola establecida en Las Marismas, que también dio origen a dos hermanos más.
Su finca en Las Marismas ha sido visitada por numerosas celebridades, desde Ava Gardner hasta Geraldine Chaplin, Bo Derek, Diandra Douglas y Daryl Hanna, así como Paz Vega con su padre, Campito, antiguo banderillero de sus cuadrillas.
Ángel Peralta Pineda, nacido en 1925, y fallecido en 2018 a los 93 años de edad, mostró su pasión por los caballos desde temprana edad. Debutó como rejoneador a los 19 años en la plaza de la Pañoleta en Camas, Sevilla, en 1945. A lo largo de sus 55 años de carrera, ha lidiado con éxito seis mil toros. En los años sesenta, encabezó el escalafón de rejoneadores, destacando su enfrentamiento con Álvaro Domecq. Su asociación con su hermano Rafael y Manuel Vidrié marcó una etapa importante, y en 1979 brilló en la Maestranza de Sevilla. Además, Ángel Peralta es reconocido por su destreza quirúrgica en el manejo del bisturí, aprendida tras una cornada a uno de sus caballos.
En el ámbito cinematográfico, Ángel participó en películas como "La princesa de Éboli" (1954) y "Cabriola" (1965). También ha dedicado parte de su tiempo a la literatura, siendo autor de obras como "Cabriolas" (1960) y "El Centauro de las Marismas. La sabiduría de un jinete. Las cabriolas de mi mente" (2012).
Manifestó en una entrevista que de todos los caballos que ha montado guarda gratos recuerdos pero quizás del que más y al que le tiene dedicado un bonito poema es 'Cabriola' que recibió una 'corná' mortal. Cita otros tales como las yeguas 'La Mejicana' y 'La Perlita', el caballo 'Ingenioso', 'Jabato', 'Ruiseñor', 'Gaviota'...
Ángel Peralta es el único rejoneador en posesión del 'Rejón de Oro', otorgado por unanimidad de los rejoneadores. En 1992 le otorgaron la Gran Cruz de la Orden del Mérito Civil.
Por otro lado, Rafael Peralta Pineda, nacido en 1933, es el menor de los hermanos y ha dejado una huella significativa en el arte del rejoneo. Debutó en 1957 en Constantina, Sevilla, y a lo largo de 43 temporadas, rejoneó cerca de 4.000 toros. Su estilo innovador en el tercio de banderillas y su participación en el cartel de los Cuatro Jinetes del Apoteosis junto a Álvaro Domecq y su hermano Ángel marcaron hitos en el toreo a caballo en España.
Rafael Peralta, es padre de Rafael Peralta Revuelta y tres hijas, En 2002 le fue concedida la Cruz de Oro de la Orden Civil de la Solidaridad Social, que concede el Ministerio de Trabajo y Asuntos Sociales. Con este premio se reconoció la trayectoria solidaria de este rejoneador que, durante los anteriores cuarenta y ocho años, organizó un festival taurino en Medina de Rioseco (Valladolid) cuyos beneficios se destinan a sufragar los gastos del Hospital Casa Asilo Santi Spíritus y Santa Ana. Su retiro en el año 2000, tras 43 temporadas ininterrumpidas, fue un punto culminante en una carrera exitosa que incluyó la corta del primer rabo obtenido por un rejoneador en Sevilla en 1965.
Caballos Peralta. Los hermanos Peralta llevan toda una vida de entrega y dedicación a la cría de caballos, tanto en el Pura Raza Español, como en el caballo de deporte para rejoneo y para competición. Los Hermanos Peralta han sido Presidente y Vicepresidente de la Asociación de Caballos de Estirpe Cartujana y cuentan con numerosos reconocimientos y condecoraciones en el mundo ecuestre, destacando entre muchos premios, las prestigiosas “Espuelas de oro” recogidas en Wembley (Inglaterra), la Gran Cruz de Beneficencia o la Medalla de Oro al Trabajo. Su reconocimiento internacional viene avalado no sólo por su trayectoria en los ruedos, sino por dedicar todo su entusiasmo en la crianza y reproducción del ganado equino. Selección dada desde sus grandes conocimientos como grandes jinetes y caballistas, dándole tanta importancia al carácter y buen temperamento de sus caballos como a la conformación y correcta morfología de todos los ejemplares que crían.
Autor; Feliciano Robles
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